Maria-Ana Vaillot confortaba a Odile Baumgarten mientras esperaban su ejecución: “Tendremos la felicidad de ver a Dios y de poseerlo por toda la eternidad… y serems poseidas por él sin miedo a ser separadas de él, jamás”
Maria-Ana Vaillot

Maria-Ana Vaillot confortaba a Odile Baumgarten mientras esperaban su ejecución: “Tendremos la felicidad de ver a Dios y de poseerlo por toda la eternidad… y serems poseidas por él sin miedo a ser separadas de él, jamás”